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EDITORIAL NN 12 /Staff articulistas

  • NN
  • 13 jul
  • 3 Min. de lectura

Actualizado: 13 jul

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“Mando mi desprecio a los Mandarines del Mundo

Fuera tu rey, snob, plebeyo…

Y fuera tu imperialista, charlatán de la sinceridad.

¡Ultimátum a todos ellos, y a todos los otros que sean como todos ellos!”

Fernando Pessoa.

 

 

Recibimos este siglo rodando suelo abajo, abrazados de  amigos extintos, drogados en meta anfetamina y esa epifanía llamada juventud.  Hoy ya lejano ese tiempo otro, lamentamos su levedad irremediable, su efímera presencia, atesoramos vivencias y recuerdos como huesos santos entre medio de imágenes, olores, emociones… A pesar de su corta duración, sentíamos algo especial, algo como una suerte de inocente ilusión sobre el devenir. Poco más de una década atrás habíamos abandonado la oscuridad asesina y había luz, sueño, esperanza. A poco andar comenzarían los claroscuros y en los años sucesivos el cromatismo mutaría desde tonos esperanzadores hacia aquellos de incógnita, desconfianza… En medio de los años dos mil, la aparente idea de un genuino sentir común, de una búsqueda identitaria, se iría transformando gradualmente en una batalla bestial entre  animales por un poco de un algo indescifrable, un hambre de no sabemos qué, como un enemigo que no deja ver su rostro, su verdadera esencia.

Y, al fin, la verdad.

Detrás de la maleza que había colonizado el territorio de sur a norte, una vez ésta estuvo ya crecida, empezaron a aparecer bandidos de todas clases y colores que se habían criado y alimentado guarecidos en sus múltiples cavernas, en sus innumerables figuras, todas ellas reguladas, incluso legisladas. Mientras más rápido pasara el tiempo, mejor para los ladrones de siete leguas, mejor para el que articula la felonía y mejor para la astilla del mismo palo…

En algún momento, cuentan, se resquebrajó la tierra y se volvió a salir el mar.

Murió gente. Mucha.

A las fracturas emocionales, sociales y políticas, tapadas con tierra, se le unieron -así como ocurre en este particular culo del mundo cada cincuenta años- grietas magmáticas, que transformaron transitoriamente pueblos y ciudades en una nueva versión del lejano oeste, con tiempo detenido y apagón. Una vez más el miedo y el hambre como amalgama social y modo de resistir. Una vez más, todo cosmético, intenso pero de corta duración. ¿Se acuerdan que nueve años después ocurriría el peor cataclismo social del cual teníamos memoria por estos pagos? ¿Se acuerdan que pocos años después enfermaríamos todos de un nuevo mal que cubrió con su manto desconocido todas nuestras infecciones y patologías históricas negadas? ¿Se acuerdan?

Mientras todo esto sucedía, en silencio, entre medio de la maleza, cada vez más desvergonzados, los facinerosos irían mostrando su rostro y se iría radiografiando los tentáculos de su red, la telaraña en la cual caeríamos todos como inocentes insectos de corta vida. Algo muy similar, un poco antes, les pasó a nuestros hermanos del otro lado del cerro. El cantante Fito Páez, absorto, escribía al constatar el desastre que se les revelaba irremediablemente real: “ y es posible que los hijos puedan cambiar lo que hicimos; y la casa nunca más desaparezca”, usando la Casa como metáfora de ese extraño concepto que llamamos Patria, Nación, País…

Hoy al lado oriental del cerro reina un Payaso, un Títere.

En nuestro caso, ¿creen ustedes que podrán nuestros hijos cambiar lo que hicimos?

¿Podrán,  a pesar de que los mecanismos de crianza y adoctrinamiento migraron -en algunos casos- desde los libros, el silencio, el chicote y la cuchara de palo a pasarles el celular y el computador para que nos dejen comer tranquilos?

¿Podrán?


Dirección; NN

Editor GeneralAlexis Figueroa Aracena.

ProducciónSantiago Ramírez.

Editor PolíticoOscar Vivallo. Fotografía/fotógrafoManuel Morales Requena. ComercializaciónNN.

Diseño y Arte EditorialEleDiseño

Foto portadaManuel Morales Requena.

 

 

Colaboran este número:

Oscar Vivallo Psicólogo, Dr. Phil. Political Sciences, at Freie Universität Berlin, Germany. Investigador y docente, 

columnista estable de NN.

Ursula Medalla Antropóloga, escritora, profesora, investigadora. Fue participante del colectivo Agosto Negro. En el 2018, publica el libro Parias, por Taller del Libro, Concepción.

Juan Carreño. Escritor. Ha publicado poesía, crónica y novela. Destacan, Compro Fierro (2008), Budnik (2016) y Paramar(2019).Miembro fundamental de la Escuela popular de Cine y del itinerante Feciso (Festival de Cine Social y Antisocial).

Esperanza Aguirre Palma Justamente, eso: esperanza, aunque también algo más...

Alexis Figueroa Aracena. Escritor, editor, realizador cultural. Editor general de NN. Tiene un trabajo creativo constante ligado a la gráfica narrativa y la experimentación. “Operador de palabras” define su actividad.

Arnolfo Cid Escritor, editor, productor cultural.  Maneja el Taller del Libro, Concepción, núcleo editorial con énfasis de la producción regional.

Germán Estrada. Creador musical, agente cultural y poeta. Vive en su particular laberinto – aunque no pasa desapercibido- allá por el sector norte de Concepción.

Andrea Franulic.Profesora de castellano y doctora en lingüística. Feministaradical de la diferencia en Feministas Lúcidas. Como autora tiene varias publicaciones, siendo una de las últimas: Confesiones de una amante de la lengua materna, 2023, Madrid, Sabina Editorial.

Mario Z.Mario Z (1970), artista visual y sonoro. Estudió percusión en el

 Bellas Artes, mención Pintura en la UniversidadArcis. .Su trabajo se ha desarrollado 

desde la pintura, instalación, sonido y música experimental.

-Elvira Hernández Poeta, una de las voces más singulares de la poesía chilena actual. Premio Nacional de Literatura 2024. Algunos de los temas recurrentes en su poética han sido el viaje -ya sea de carácter real o metafórico- y la ciudad -vista tanto en calidad de espacio físico como de campo semántico donde se entrecruzan múltiples discursos heterogéneos.

Rainiero Guerrero Periodista y director de Radio Futuro. Antes de eso-2014- deambuló entre el periodismo deportivo en W Radio, La Red, Mega y hasta alguna oficina pública del estado de Chile.

Sonia Montecino Profesora titular, Depto. de Antropología Universidad de Chile. Premio Nacional de Humanidades y Ciencias Sociales 2013.

Yogui Alvarado Creador musical, líder de la mítica banda Emociones Clandestinas. Falla Electrica, Polyphonic Love, Territorio en crisis, son parte de sus actuales exploraciones en la electrónica musical.

Noelia Figueroa Burdiles Escritora, investigadora social, Doctora en Estudios Interculturales por la UCT, Temuco. Codirectora de Amukan Editorial Itinerante.

Oscar Vidal (Talcahuano, 1982) Psicólogo con especialización en psicología comunitaria e intervención con víctimas de violencia grave. 

Como escritor, su obra ha sido publicada en distintas antologías. En 2010 publica Paxaricu reeditado por 

Balmaceda Arte Joven en 2016. En 2024 publica Zonas de sacrificio, por Editorial Taller del Libro.

 

Distribución:

Concepción: Librería J; Tostaduría Colloacán; Disquería Sonidos; Unidad de Geriatría, Casa de Salud; Restaurant Caleta Ongolmo; Bar Mal Paso, Cecinas PZ, San Pedro de la Paz; Vidactiva Artes Terapéuticas y del Movimiento. Temuco: Biergarten Klein; Casino Las Araucarias, Campus Andrés Bello, UFRO. Valdivia: Taller compartido La Cisne Negro, Baquedano 628. San Pedro de Atacama: Casa Buena Vista, Lascar 588.

 
 
 

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